Lamento
haber sido tan débil, tan insuficiente. Debí ser más fuerte y apoyarte, hacer
un poco de lo que mucho que tú hiciste por mí. Sé que de nada valen las pocas
sonrisas que te di, contra los mil disgustos que te hice pasar. Debí
haber hecho más, me repito a diario, porque tú me necesitabas y yo no
hice nada.
Ni un millón de lágrimas arreglaran lo que no hice, ni lo que hice, pero no hay momento en que no me arrepiento de ello. Tú me diste luz y yo no pude devolverte ni un poco, porque en mí no vive nada.
Sé que mis noches de insomnio no te traerán de vuelta, ni mis letras resarcirán el daño hecho, pero cada noche rezaré porque tu vida siempre esté llena de amor.
ZASLOVE, LA MALDITA ROJA
Ni un millón de lágrimas arreglaran lo que no hice, ni lo que hice, pero no hay momento en que no me arrepiento de ello. Tú me diste luz y yo no pude devolverte ni un poco, porque en mí no vive nada.
Sé que mis noches de insomnio no te traerán de vuelta, ni mis letras resarcirán el daño hecho, pero cada noche rezaré porque tu vida siempre esté llena de amor.
ZASLOVE, LA MALDITA ROJA
Estar enamorada y no tener insomnio debe ser una de
las peores combinaciones de la vida, estás ahí sentada en tu sala o en tu cama
pensando en la persona que amas, sólo para darte cuenta de que todos los
errores que existen en su relación.
¿En dónde está él? ¿Qué es lo que haces? ¿Está
pensando en ti como tú en él? Todas esas dudas llegan a tu cabeza, mientras tú
sólo quieres dormir y no hay forma de evitarlas, porque una vez que entran en
tu cabeza es difícil sacarlas o al menos para mí.
Justo ahora no tengo una relación, pero sigo
pensando en la persona a la que (muy ridículamente) le pertenece mi corazón y
es que después de varios años, decidí sacarlo de mi vida y por primera vez no
lo hice de manera visceral, o sea, después de una pelea o de un berrinche.
Simplemente, nuestro tiempo se había acabado (seguro él piensa que sólo es
decisión mía) y tuve el valor de decir adiós.
Yo le dije adiós y él no contestó, bueno sólo dijo
un par de palabras enojadas que me lastimaron y me hicieron preguntarme si lo
que hice fue un error. Así que ahora estoy enamorada, con insomnio y pensando
en cometí un error.
Lo cierto es que él y yo llevábamos sin estar
juntos más de dos años y más de medio año sin vernos. Aun así, nos duele decir
adiós. ¿Por qué? Supongo que nunca dejamos de amar a nadie o eso me acaba de
decir una amiga, pero aunque nos amemos siempre, ya no podíamos estar juntos.
Nuestra relación nunca fue fácil, él es una persona
que tiene miles de conflictos externos que no lo dejan en paz y yo soy la clase
de mujer que tiene la cabeza llena de conflictos que no la dejan estar bien.
Tal vez algún día estemos juntos de nuevo o tal vez
nunca, pero todas las noches rezaré porque este bien, porque nadie lo vuelva a
dañar y entienda que él es impresionante.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario